UNA CRISIS SANITARIA QUE NOS LLEVA A UNA MAYOR CRISIS ECONÓMICA Y SOCIAL

Leganés es la ciudad de la CAM con mayor incidencia del coronavirus, tanto en el número de afectados, como en el número de personas que han perdido la vida a causa de esta pandemia.

El Hospital Severo Ochoa fue el primero en toda España en sufrir el colapso  por la falta de recursos para atender a las personas enfermas. El personal sanitario no tenía los recursos necesarios para atender en condiciones dignas a quien llegaba con síntomas a Urgencias; ha habido momentos que ni siquiera una silla. Y tampoco los profesionales tenían equipos de protección individuales (EPIS) para protegerse de un posible contagio.

Las residencias de Leganés (8 en la actualidad), también han sido un foco de dolor, ya que las familias han añadido al dolor de perder a una persona querida, sin poder despedirse, la angustia de no tener información de su estado. Hasta 3 semanas han tenido que esperar algunas familias para localizar a su familiar fallecido para poder enterrarle. Nuestras residencias están atendidas por empresas privadas, en muchos casos de fondos de inversión y fondos buitre o constructoras, que sólo pretenden el beneficio económico a costa de las personas, tanto residentes como trabajadoras, que en muchos casos han estado desarrollando su labor sin material de protección.

Por eso lo primero que queremos hacer es dar las GRACIAS. Gracias a todos y todas las profesionales que se han preocupado por las personas afectadas y sus familias y las han cuidado: personal sanitario y cuidadores. Pero también a los que están trabajando para poder frenar este virus mientras nosotros nos cuidamos en nuestras casas: personal municipal, transporte, investigación, cuerpos de seguridad, medios de comunicación, voluntariado…

Gracias a la solidaridad de asociaciones y de tantas vecinas y vecinos que han hecho aportaciones para adquirir material -o lo han elaborado de forma gratuita- para el personal sanitario del Hospital, fundamentalmente, aunque también para algunas residencias. El pueblo de Leganés ha dado muestra, una vez más, de que es un pueblo solidario, que aporta lo que tiene cuando se necesita. Las asociaciones vecinales hemos aportado material sanitario y estamos colaborando con la Universidad Carlos III en el montaje de las viseras y la red ayuda mutua creada para el apoyo psicológico y realizar compras a los más vulnerables.

La crisis sanitaria de una forma u otra mitigará y acabará por desaparecer. No sabemos cuándo.

Sin embargo, lo que todavía no se ha manifestado en toda su realidad, debido al parón económico en el que nos encontramos, es la crisis económica y social.

Antes de la llegada del COVID 19 en nuestra sociedad los índices de desigualdad social y la cantidad de personas en riesgo de pobreza eran de los más altos de la UE, según el informe AROPE 2019, en España, 12,3 millones personas (26,1% de la población). Tampoco habíamos salido de los efectos de la crisis del 2008 que dejó una economía frágil para las familias, un mercado laboral basado en la precariedad y una enorme deuda pública, familiar y privada, con lo que esto conlleva de pago de intereses, recortes y limitaciones en la inversión pública. Ya a día de hoy sabemos que la crisis del COVID 19 está suponiendo un varapalo para muchas familias que se van a quedar sin ingresos de ningún miembro de la familia. Todavía no somos conscientes porque estamos prestando más atención a la situación de salud, por su urgencia, pero esta situación es real.

Los distintos gobiernos están tomando acuerdos para atajar esta falta de ingresos de muchas familias. Será el Ayuntamiento de Leganés, como la administración más cercana, quien tenga que gestionar las ayudas sociales para que lleguen a quienes lo necesitan: familias sin ingresos, personas sin techo, personas mayores solas, menores… Y nosotros vamos a estar vigilantes para que así sea.

Pero además lo que reclamamos del Ayuntamiento de Leganés, en estos momentos más que nunca, es que ponga como prioridad de su gestión la atención a familias y personas sin recursos y aquellos que demanden una atención social como mayores solos, menores, sin techo…. Eso conllevará la mejora de ciertos servicios municipales y la puesta a disposición de recursos económicos. Así como un cambio en la actitud de esta corporación que tiene que empezar a tener en cuenta y apoyar el trabajo del tejido asociativo y no verlo como a un enemigo.

Pero es seguro que no siempre se aplicará con eficacia y somos nosotras quienes vamos a convivir en nuestros barrios con familias que van a necesitar de la solidaridad de las vecinas y vecinos para afrontar las necesidades básicas (alimentación, pago de alquileres, consumos del hogar,  medicamentos, necesidades de las niñas y niños…). Y no podemos fallarles. Desde las asociaciones vecinales vamos a fomentar las redes sociales que existen en la ciudad para coordinar todos los esfuerzos y recursos que sean necesarios para atajar estas situaciones. Por último, informar que hemos abierto una cuenta para recibir aportaciones de todas y todos los vecinos para poder abordar esta tarea de Red Social de ayuda Vecinal.

Podrás aportar en el número de cuenta de la FLAV – Ayuda social Cuenta: IBAN ES64 3067 0160 6428 2504 3926

PARA QUE NO QUEDE NINGUNA PERSONA FUERA

#RedSocialLeganes

#ResistenciaSocialLeganes

Leganés, 19 de abril de 2020

FEDERACIÓN LOCAL DE ASOCIACIONES VECINALES DE LEGANÉS

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